Creatividad y estrategia española detrás del relanzamiento de la marca de pasta italiana en los principales mercados europeos dentro del segmento premium
Ebro Foods, empresa propietaria de la mayoría de la sociedad italiana Pastificio Lucio Garofalo, ha iniciado el relanzamiento mundial de la marca Garofalo, especializada en productos premium de pasta seca alimenticia (la empresa controla además otras insignias como Santa Lucia y Russo de Cicciano). La firma cuenta con una destacable cuta de mercado en Italia frente a Barilla, su principal competidor, pero ahora inicia un proceso de expansión internacional donde la proyección de la marca y los valores a los que se quiere asociar (calidad, tradición y aspiracionalidad) jugará un papel importante en mercados clave para empresas de este sector como el Europeo.
Considerado como uno de los mejores productores del mundo no solo por su tecnología de vanguardia sino también por la aplicación de los conocimientos de generaciones de artesanos de pasta a su cartera de productos, la historia de Pastificio Lucio Garofalo se remonta a más de 100 años atrás cuando por Real Decreto se le concede una licencia exclusiva para la instalación de una fábrica de pasta en la ciudad de Gragnano (Nápoles), considerada cuna de la pasta gracias a su privilegiada ubicación entre el mar y la montaña, que favorece el desarrollo del clima ideal para la producción de pasta y su posterior secado. La cifra de ventas brutas de la sociedad ronda los 140 millones de euros.
Campaña aspiracional
La campaña de relanzamiento de la marca a nivel internacional pone el foco en el potencial de la pasta italiana de alta calidad, la denominada “pasta di Gragnano”, cuya elaboración y consumo forma parte de la tradición y la cultura gastronómicas de dicho país. Con la mente puesta en el consumidor del segmento Premium, los responsables de marketing ha ideado una campaña de imagen para grandes medios, pero principalmente se difundirá en televisión.
De cuidada producción y factura, el concepto creativo de la campaña gira en torno a la tempestad o tormenta de sensaciones que el comensal, y también el cocinero, experimenta con los productos Garofalo. Detrás de la realización de la campaña está la agencia independiente española Fairweather/ssba, que con apenas cuatro meses de vida ganó el proceso de selección que la marca puso en marcha a mediados de 2015 a nivel internacional y en el que participaron agencias de Italia, Francia y España. Eso sí, contó con la colaboración d la agencia argentina Soho Square Buenos Aires. La producción de la campaña ha corrido a cargo de Garlic y Los Producers. La realización es obra de Yann Malka y la creatividad es responsabilidad de Mariano Duhalde, CCO de la agencia.