Mercedes Padrino, Chief Strategy Officer de Mindshare Spain.
La tecnología digital está facilitando que dispositivos, objetos y personas se comuniquen virtualmente entre sí, a cualquier hora y desde cualquier sitio. Esto genera que aumente de forma exponencial la cantidad de datos que pueden ser capturados, almacenados y analizados.
Nos estamos asomando a una época, la del Internet de las Cosas, que va a estar dominada por las tecnologías conectadas. En este contexto, ¿qué productos y servicios pueden ayudar a los consumidores a adaptarse a este nuevo entorno?.
Todo lo que utilizamos ahora tiene el potencial de conectarse a internet, lo que nos proporcionará nuevos servicios y productos. Esto es emocionante, pero: ¿cómo reaccionarán los diferentes tipos de consumidores a estas nuevas tecnologías, y qué impacto tendrán éstas en las personas?.
En Mindshare hemos identificado cuatro actitudes clave hacia la tecnología y los medios. Estos comportamientos representan cómo los consumidores elegirán utilizar la tecnología según sus necesidades, preocupaciones o situación económica.
1 - Lo quiero ya. Este grupo de consumidores busca ofertas hiper personalizadas. Quieren la última tecnología sin importarles los datos personales que tienen que compartir. Siempre quieren ser los primeros en probar algo, aunque no dispongan del dinero necesario para conseguirlo. Les interesa todo aquello que les permita estar más conectados con sus allegados. Aceptarán fácilmente la RV y AR para vivir experiencias a otro nivel.
2 - Lo quiero a mi manera. Son los guardianes de la privacidad. Lo gratis no les seduce. Quieren todos los beneficios de la vida conectada, pero no quieren ver su privacidad invadida por la tecnología. Estos consumidores suelen tener un poder adquisitivo más alto. Muchos de ellos tienen su propio negocio y les interesa las tecnologías que les ayuden a mezclar trabajo y vida en el hogar.
3 - No estoy seguro de que lo quiera. No están en contra de las nuevas tecnologías, pero recelan de su uso porque están preocupadas por su privacidad. Aceptan las nuevas tecnologías pero de forma lenta. Sin embargo, cuando vean que los objetos conectados les facilitan la vida, se adaptarán a ellas rápidamente. En este grupo los dispositivos controlados por voz o con sensores serán mejor aceptados, pues parecen más naturales y menos intrusivos.
4 - Quiero todo lo que pueda conseguir. Estos consumidores no cuestionan a los proveedores de tecnología y están preparados para ceder cualquier dato personal a cambio de obtener servicios y conexiones gratis. Suelen ser consumidores de mercados emergentes, por lo que su objetivo es acceder a la tecnología, no poseerla necesariamente. Por eso las tecnologías que se basen en infraestructuras tendrán más impacto ya que en estos mercados se está invirtiendo ya en planificación de ciudades inteligentes.
Podemos observar que todos estos grupos de consumidores necesitan tecnología, no solo para simplificar sus vidas sino para estar más cerca de la gente. ¿Nos llevará la vida conectada a estar más conectadas como personas? ¿Acabarán las personas estando más aisladas por culpa de la tecnología? Existen preocupaciones por las visiones de un futuro deshumanizado donde la tecnología domina la vida de las personas, como si se tratara de una película de ciencia ficción. Según el Gartner Research, una persona tendrá por término medio más conversaciones con los bots o las máquinas que con su pareja.
Ante nosotros tenemos un mundo de infinitas oportunidades y retos para que la tecnología mejore nuestras vidas, pero no olvidemos nunca la importancia de la interacción “a la antigua”; en un mundo de bots realidad aumentada, y dispositivos interconectados, nada será más apreciado que el tiempo real que toma una persona para hablar personalmente con otra, las emociones reales y la empatía continuarán siendo el valor más importante de la comunicación.
