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El consumo de emisión lineal tradicional pierde fuerza frente al consumo diferido y a la carta

Según el informe ‘Televidente 2.0’, los usuarios cada vez encuentran más valor en la suscripción

Los cambios tecnológicos y la oferta están afectando al consumo audiovisual, como así lo pone de relieve el informe ‘Televidente 2.0’, presentado por The Cocktail Analysis. Según el estudio, el consumo de la emisión lineal tradicional está perdiendo fuerza con respecto al consumo en diferido y a la carta. Es más, los internautas declaran que solo la mitad (53%) del total de sus consumos son de televisión lineal, ya sea desde TDT o desde el lineal de la tele de pago. El resto del consumo se reparte entre video on demand, grabadores y servicios de recuperación, apps, streaming y descargas piratas. Además, un tercio de los consumos se realiza sobre plataformas IPTV, mientras que un 10% del declarado se refiere a plataformas OTT.   

Por otra parte, el informe pone de manifiesto que los usuarios están evolucionando en su forma de relacionarse con los servicios de televisión de pago y cada vez dan más valor a la suscripción. De hecho, el 51% de los internautas ya paga por servicios de televisión (IPTV y/o OTT) y se observa un panorama de convivencia entre las plataformas IPTV y OTT. La primera muestra un ligero crecimiento frente al año anterior y las diferentes alternativas de OTT son elegidas por un 25% de internautas. Además, un 16% de internautas mantiene pago sobre ambos tipos de plataforma de manera independiente. 
 De este modo, tanto las plataformas IPTV como las OTTs muestran espacios de valor para los usuarios. Mientras que las plataformas de IPTV basan su fuerza en el cuádruple play y un rango muy amplio de contenidos de valor, las OTTs se fortalecen gracias al acceso exclusivo a contenidos de valor (sobre todo, las series de referencia de cada player) bajo un sistema de suscripción muy económico, y que limita la exigencia que los usuarios. 

La integración de servicios telefónicos y el acceso a contenidos de televisión premium es el principal motivo de contratación del servicio, así como la motivación de búsqueda de contenidos específicos dentro de estas plataformas (principalmente, fútbol, series de referencia y películas de estreno), que lleva a una parte de los suscriptores a tener una mayor vinculación y una mayor demanda hacia el servicio.  Sin embargo, los suscriptores valoran también que los contenidos sean accesibles fuera del lineal (ya sea mediante un catálogo VOD, aplicaciones, grabaciones, etc.) que permitan sacar partido a los contenidos y hacer un consumo de los mismos adaptado a sus necesidades. 

En lo que respecta a los smartphones y a la SmarTV, el estudio señala que consolidan posiciones, ya sea como acceso de consumo audiovisual, en el caso de los smartphones, o para consumo no lineal, en el caso de la SmartTV. Es especialmente destacable que la SmartTV ha llegado a una situación de madurez puesto que la mitad de los hogares internautas dispone ya de una con una experiencia de uso positiva. Esta situación permite la extensión del uso del dispositivo para el consumo audiovisual no lineal (24% de los que lo tienen lo usan a diario para ver contenidos). Por su parte, el smartphone muestra una posición sólida y empieza a generar una nueva tendencia de uso como acceso a contenido audiovisual: un 29% de sus usuarios utiliza este dispositivo para el consumo audiovisual durante 4 o más horas en semana. En estos casos, el disponer de un acceso inmediato, siempre disponible y con el contenido deseado, fomenta una preferencia sobre otras pantallas que proporcionan una mejor experiencia de visionado. 

En cuanto Youtube, ‘Televidente 2.0’ observa un ligero descenso en penetración (4%), uso en dispositivos y consumo, que se pueden achacar a una población internauta que crece en los segmentos de mayor edad y la aparición de nuevas ofertas de contenidos relevantes para los usuarios y que disputan el tiempo disponible. 

En cuanto a las características sociodemográficas, los usuarios muestran perfiles diferentes en función de las plataformas que utilizan. En concreto,  los suscriptores exclusivos a OTTs son los de perfil más joven (57% menor de 35 años) y de género masculino (57%), habituados a consumir series extranjeras y películas. Para ellos, es clave el bajo precio del servicio OTT. Por su parte, los usuarios que mantienen suscripciones a OTT e IPTV se muestran como un segmento de alto valor al ser grandes consumidores de todo tipo de contenidos (fútbol, series, películas, etc.) en mayor medida que el resto de segmentos. El 60% se encuentran entre los 25 y 45 años y el precio no es una barrera para ellos, sino que valoran el disponer de un servicio más adaptado para ver el contenido que desean. En cuanto a los suscriptores a IPTV muestran un perfil de consumo focalizado en los contenidos clave de esta plataforma (fútbol, series extranjeras y películas) pero muestran un menor interés por el resto de opciones. Por último los internautas sin ningún tipo de suscripción de pago (49%) son los de mayor edad (65% por encima de los 35 años)  y con mayor presencia de mujeres. Sus consumos más destacados son aquellos propios del lineal TDT: noticias, series españolas, música.