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Con seis siglos de historia, la cervecera belga Román llega a España

El grupo Roman, una de las cerveceras belgas más emblemáticas, aterriza en España como punto de inicio de su expansión internacional

En una pequeña carretera que unía Alemania y Francia, Joos Roman fundó ‘De Clocke’. Lo que empezó siendo un albergue para viajeros, acabó siendo la fábrica de cervezas Roman. A lo largo de estos 5 siglos, muchos han sido los acontecimientos vividos y que han marcado el carácter de este fabricante de cervezas belga. Hasta la fecha, su ámbito de distribución había sido local; sin embargo, la compañía interncional de la compañía ha hecho que, de forma muy paulatina, quiera extender todas sus marcas por Europa y España ha sido el primer país elegido para su expansión. Así, y con el espíritu de cuidar todo el proceso Roman ha creado en España una filial propia, Roman Beverages Ibérica, con José Manuel del Olmo al frente y ocupando el cargo de chief officer marketing para todo el grupo. Del Olmo, que anteriormente sido director general de Heineken y responsable de la introducción de marcas como Maes o Brabante en España, ahora será el responsable de desarrollo internacional y consejero delegado para España.

De cara a la introducción en el mercado español y la posterior expansión internacional, la agencia Fairweather/ssba, con Luis Pérez-Solero y Mariano Duhalde al frente, es la responsable de la creación del nuevo posicionamiento internacional para la gama de cervezas Roman. Así, desde el concepto ‘Creating Pleasures since 1545’, el trabajo creativo incluye el diseño corporativo, diseño de envases, apoyos para punto de venta y el desarrollo de una campaña multimedia para soportes gráficos y audiovisuales.

En cuanto a la distribución de Cervezas Román, las marcas Roman (que hace honor al ritmo, la efervescencia y el movimiento en las ciudades), Ename (hace alusión al placer, el sabor y el reposo), Adriaan Brouwer (inspirada en el pintor flamenco del mismo nombre), Gentse Strop (hace honor a la ciudad de Gante) y Sloeber (rinde tributo a la figura del pícaro), ya está presente en un centenar de puntos de venta en Madrid. Ahora la ambición de la marca es convertirse en un referente del segmento premium, primera opción de cervezas belgas y estar presente en el resto de España a lo largo del año 2017.