Ante el aumento de la legislación en lo relativo a la privacidad, la publicidad contextual se presenta como una herramienta clave para seguir conectando con el consumidor con el mensaje correcto y en el entorno idóneo
La publicidad programática, dependía hasta hace poco de las cookies de terceros. Sin embargo, la creciente preocupación por la privacidad y su prohibición, han forzado a los profesionales del sector a encontrar otras herramientas para llegar a sus audiencias. Hay una necesidad urgente de métodos alternativos que respeten la privacidad pero que ofrezcan contenido relevante.
De acuerdo con Exte, la publicidad contextual se presenta como una gran opción principalmente porque no depende de las cookies. Este tipo de contenidos permite mantener la relevancia y segmentar de manera eficiente sin depender de los datos de navegación o la información personal de los usuarios. Además, pueden mejorarse empleando first party data, dando lugar a una alta precisión.
Además, la eficiencia de las campañas ha mejorado considerablemente durante estos años gracias a la posibilidad de detectar y comprender con precisión el significado y e contexto de los contenidos online, las marcas pueden focalizarse en su target.
La continua optimización ofrece a los anunciantes la posibilidad de adaptar su campaña a sus necesidades y modificar las características de la misma en función de los resultados. También cabe destacar que los usuarios demandan cada vez más una comunicación cada vez menos intrusiva y más precisa, por lo que la tecnología de esta publicidad contextual permite a los anunciantes relacionarse de manera más precisa.
La publicidad contextual como sustituto de la programática
