El holding publicitario cerró el tercer trimestre de 2025 con una caída del negocio más intensa de lo previsto, lastrado por cifras negativas arrojadas por WPP Media tras su reorganización interna. La nueva dirección acelera cambios estratégicos, impulsa la apuesta por la IA y revisa a la baja sus previsiones anuales
WPP ha presentado unos resultados correspondientes al tercer trimestre de 2025 que confirman un escenario más complejo de lo anticipado. La compañía registró ingresos de 3.259 millones de libras, con un retroceso del 8,4% interanual, mientras que los ingresos netos (revenue less pass-through costs) descendieron un 5,9% en términos comparables. El área de medios, correspondiente a WPP Media, ha sido uno de los principales factores de presión, tras encadenar un trimestre peor que el anterior debido a la pérdida de cuentas significativas y a una menor inversión en categorías clave como gran consumo, automoción y administración pública en mercados como Estados Unidos y Reino Unido.
La propia compañía ha admitido que el rendimiento de la división se ha resentido de forma notable y que, además, la situación podría prolongarse en el corto plazo debido a nuevas pérdidas de cuentas desde octubre. Este escenario ha llevado al grupo a revisar a la baja sus previsiones anuales, situando el crecimiento de ingresos netos entre el -5,5% y el -6% y estimando un margen operativo cercano al 13%.
Al frente de la reorganización se encuentra la nueva consejera delegada, Cindy Rose, quien ha reconocido que los resultados no son satisfactorios y ha anunciado medidas encaminadas a simplificar estructuras, acelerar la toma de decisiones e impulsar una cultura operativa más ágil. Entre los movimientos recientes destaca el nombramiento de Devika Bulchandani como directora de operaciones global, así como el de Laurent Ezekiel al frente de Ogilvy Group, con la intención de reforzar el liderazgo creativo y comercial del holding.
“Los resultados recientes no son aceptables y estamos actuando para corregir el rumbo”, afirma Cindy Rose, CEO de WPP, quien destaca que la compañía cuenta con “sólidos fundamentos: grandes clientes globales, capacidades creativas, de producción y medios, talento de primer nivel, escala internacional y alianzas tecnológicas clave”. Rose señala que el plan pasa por “simplificar e integrar la oferta, impulsar el uso de datos e IA, mejorar la ejecución comercial, reorganizar la estructura interna y mantener una asignación disciplinada del capital para maximizar el valor para los accionistas”. Aunque reconoce que “llevará tiempo ver resultados”, asegura que “los primeros pasos ya están en marcha” y confía en que la compañía está construyendo “la cultura y el plan adecuados para impulsar el crecimiento futuro”.
La estrategia para recuperar tracción pasa en gran medida por la apuesta en tecnología y en nuevas capacidades orientadas a generar más valor para los clientes. En esa línea, WPP ha renovado por cinco años su alianza global con Google para avanzar en soluciones basadas en IA y cloud con foco en personalización del marketing. También ha lanzado WPP Open Pro, una versión ampliada de su plataforma propietaria de IA diseñada para planificación, creación y activación de campañas, que ya utilizan más de 76.000 empleados en todo el mundo. El grupo aspira a consolidar esta evolución tecnológica como ventaja competitiva y como palanca de integración entre creatividad, medios y datos.
Por regiones, Estados Unidos registró un retroceso del 6% interanual, mientras que el Reino Unido mostró la caída más pronunciada, con casi un 9% menos en ingresos netos. En Europa Occidental, el descenso fue más moderado (-4,4%), con España retomando el crecimiento frente a Alemania, que continúa en terreno negativo. En Asia, India volvió a destacar con un avance del 6,7%, mientras que China encadenó un trimestre más de descenso.
Pese al contexto, la compañía mantiene expectativas positivas respecto al impacto futuro de las medidas ya iniciadas. Su hoja de ruta para los próximos meses se centra en mejorar la ejecución en medios, optimizar costes y reforzar la integración de datos y tecnología en la propuesta de valor, con el objetivo de estabilizar el negocio y sentar las bases para un crecimiento más sólido en los próximos ejercicios.
