La serie original Movistar+, producida por Zeppelin, presenta nueva temporada y ha querido mostrar la fuerza de Amira ante las críticas culturales y estereotipos de la sociedad
Amira es la principal protagonista de la última temporada de Skam, una adolescente española y musulmana que vive en primera persona la pugna entre el mundo habitual de un adolescente en el mundo occidental, representado por sus amigas más cercanas, y sus propias creencias, elegidas voluntariamente, muy alejadas de la realidad de sus amigas. Este argumento, atrevido incluso para una serie que temporada tras temporada se diferencia por tratar temas comprometidos de forma natural, está teniendo un buen seguimiento entre los más jóvenes.
Para lanzar la última temporada, Movistar+ ha confiado en VMLY&R, colaborador habitual en el lanzamiento de sus series originales. Desde la agencia se ha creado una campaña en la que homenajea a su protagonista Amira, la cual aparece en el cartel principal, rodeada por el hiyab propio de las mujeres musulmanas, en un potente amarillo, color identificativo de la serie, que representa ese aislamiento social que siente durante la temporada, y que le provoca todo tipo de conflictos internos y con sus propias amigas.
La campaña se ha desarrollado fundamentalmente en las plataformas de Movistar+, redes sociales y medios digitales, donde la mayor parte de las piezas de comunicación han trabajado en un concepto muy sencillo y muy pegado a la trama de la serie y que se ha titulado “Ponte en mi lugar”. Con él se ha querido plantear un debate sobre la convivencia de distintas creencias y sensibilidades y la capacidad para la empatía entre los adolescentes en particular y en la sociedad en general. Y hasta ahora, está siendo todo un éxito.