La firma alemana ha retirado una campaña en China tras crear polémica por los rasgos de una de las actrices participantes
La corriente hipernacionalista que sacude China y sus medios, arrastrando a la opinión pública de forma crítica hacia empresas extranjeras, se ha cobrado una nueva víctima desde el punto de vista publicitario. En este caso ha sido la alemana Mercedes-Benz, que se ha visto forzada a retirar una campaña de publicidad puesta en marcha estas Navidades en medios digitales chinos tras generar polémica. El spot estaba protagonizado por una modelo de origen asiático que presentaba un maquillaje que, supuestamente, acentuaba sus rasgos. La pieza generó una reacción adversa por parte de los consumidores chinos, quienes señalaron que el maquillaje reflejaba las creencias y estereotipos occidentales sobre los asiáticos, especialmente sobre la población china, hasta el punto de generar una pequeña crisis de imagen para la firma de automoción en el mercado chino.
Según el periódico Global Times, del Partido Comunista, "el maquillaje de la modelo parecía tener los ojos rasgados y volvió a suscitar una acalorada discusión entre los internautas, muchos de los cuales afirmaron que el maquillaje reflejaba las creencias y estereotipos occidentales sobre los asiáticos”. Tras el hecho la firma se convierte en la última marca que recibe los embates del nacionalismo en China, que en el pasado ha asestado golpes a Dolce & Gabbana, H&M y otras empresas.
No es la primera vez que el rasgo de los ojos de los y las modelos publicitarias es tema de debate en China. Hace apenas unos meses la empresa china Three Squirrels se disculpó públicamente tras lanzar una campaña protagonizada por la modelo Cai Niang Niang con un maquillaje que acentuaba la inclinación y el rasgado de sus ojos, precisamente, tras levantar igualmente polémica entre gran parte de los consumidores locales. La propia modelo se pronunciaba al respect en sus redes sociales: “Con los ojos pequeños, ¿no soy china? Estoy totalmente de acuerdo con el patriotismo. Sin embargo, crear grandes problemas a partir de asuntos normales se ha convertido en una obsesión morbosa en el país”. Igualmente Christian Dior dejó de utilizar en noviembre de 2021 una campaña gráfica que, según los medios estatales, “desprestigiaba a las mujeres asiáticas".
Pero no solo los rasgos de los ojos son motivo de polémica y descontento. El espíritu nacionalista también defiende el origen local de los productos a consumir en China, aunque se distribuyan por marcas extranjeras. La semana pasada las redes sociales chinas estallaron por las acusaciones de que Walmart había dejado de vender artículos de la región de Xinjiang en sus locales de comestibles Sam’s Club, por ejemplo, generando una crisis reputacional en la cadena norteamericana para cerrar el año.