por José Arribas
Cuando nacemos somos paulatinamente entrenados en nuestro seno familiar y programados por la comunidad educativa para una vida estandarizada. Se nos adoctrina en pro de la colectividad y en nuestro beneficio propio, en el aprendizaje de valores universales: respeto, empatía, responsabilidad, solidaridad, voluntad, honestidad, compasión, amor, perdón y gratitud.
Desde nuestra más tierna infancia, asistimos a jornadas maratonianas de educación homogénea. Una formación docente continua en la que predomina una mirada uniformada y asociativa.
El resultado de la estandarización infantil da como resultado hombres y mujeres semejantes, análogos y sinónimos. Si a esto se suma la globalización y la digitalización que gobierna nuestra era, obtenemos como desenlace la universalización del todo frente a la suma de las partes, circunstancia extrapolable a todas las ciencias y disciplinas.
Afortunadamente para la continuidad y evolución de nuestra especie, aún hoy, hay bebes que son sumergidos en la creatividad como valor supremo. Niños que adquieren y agudizan con el paso de los años su habilidad de advertir lo que la percepción común no puede captar. Adolescentes capaces de ver que en el mundo hay algo más de lo que parece a simple vista, identificándolo y poniéndolo en valor gracias a la creatividad. Así, llegamos a la edad adulta de estos bebes que de forma y manera incipiente fueron bautizados en la creatividad. Hombres y mujeres a los que describe magistralmente la autora estadounidense Ursula Kroeber Le Guin, con la frase: “un adulto creativo es un niño que ha sobrevivido”.
Las naciones, las empresas, las instituciones, están lideradas por hombre y mujeres que cumplen fielmente a rajatabla un patrón estándar universal, en el que se observa como denominador común la carencia o no potencialidad de la creatividad. Las cosas más bellas, creativas, auténticas y memorables han sido creadas desde la edad clásica hasta nuestros días, gracias a la individualidad de mentes creativas privilegiadas: Aristóteles, Leonardo Da Vinci, Galileo Galilei, Isaac Newton, Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven, Charles Darwin, Louis Pasteur, Sigmund Freud, Nikola Tesla, Albert Einstein, Pablo Picasso, Charlie Chaplin… y más recientemente Curro Romero, Steve Jobs, Ryoki Inoue, Maradona, Michael Jackson, Ferrán Adriá, David Droga, Banksy...
Es difícil entender la escasa presencia de personalidades con mentes y trayectorias creativas contrastadas en puestos destacados y de máxima responsabilidad en política, economía, cultura, etc. El mundo empresarial afortunadamente cuenta con relevantes emprendedores creativos, con proyectos disruptivos. Aun así, es necesario la democratización e integración de la creatividad en todas las estructuras de las compañías, de lo contrario no terminará de germinar la nueva corriente de economía creativa.
Valores, innovación, adaptación y creatividad han de ser las palancas y motores para el desarrollo empresarial. Solo trabajando en armonía las empresas podrán encontrar soluciones diferenciadoras para sus productos, dotar de un poderoso valor intangible a sus marcas para hacerlas deseables.
Invertir en creatividad siempre es rentable y un activo, motivo por el cual es vital que el mundo empresarial ponga el foco en la contratación para su alta dirección de perfiles creativos multidisciplinares, capaces de liderar e impulsar la transformación en sus empresas, negocios, marcas y comunicación comercial. Estos experimentados profesionales senior creativos pueden interactuar y dirigir departamentos de marketing cada vez más juniorizados.
“Es necesario la democratización e integración de la creatividad en todas las estructuras de las compañías, de lo contrario no terminará de germinar la nueva corriente de economía creativa”
En estos tiempos nuevos, tiempos salvajes que vivimos, es importante tomar consciencia de la importancia que tiene la creatividad en el más amplio sentido de la palabra en todos los ámbitos de la vida y más concretamente como puede ayudar a las empresas a obtener éxito, crecer, generar negocio y llegar de forma disruptiva y memorable con estrategias, pensamientos y creatividades notorias a los consumidores y a la sociedad.
Las agencias de publicidad, al menos la mía, son el habitad perfecto, el Parnaso ideal para la convivencia de mentes creativas multidisciplinares y unconventional. Mentes abiertas que entienden la necesidad de interactuar, nutrirse y fructificar junto a profesionales de otras ramas como: economía, finanzas, psicología, derecho e investigación para poder alcanzar éxitos.
La creatividad se nutre de la diversidad por lo que debemos sentirnos una especie afortunad al contar con distintas etnias, culturas, razas y géneros. Más pronto que tarde, el mundo será liderado e impulsado por mentes creativas.
No podía terminar esta reflexión sobre creatividad sin aludir a un clásico de nuestra música patria. La canción “Caso Perdido” perteneciente al cuarto disco de estudio de la banda española de heavy metal Barón Rojo, En un lugar de la marcha, editado en 1985 por el sello discográfico Chapa Discos. Escúchala, no tiene desperdicio y es verdaderamente evocadora.
José Arribas (Linkedin) es socio director ejecutivo y máximo responsable creativo de Parnaso, agencia de publicidad de servicios plenos de carácter independiente afincada en España. Publicitario de largo recorrido en la industria española, la mayor parte de su carrera ha transcurrido en la vertiente de las agencias de publicidad y en el de la asesoría en marketing y comunicación a grandes, medianas y pequeñas empresas. Licenciado en Historia y master en publicidad por ICAI – ICADE y tras formar parte del área creativa en varias agencias multinacionales, Arribas da el paso a la vertiente indie, primero como director creativo ejecutivo de Mak Publicidad, donde llegó a ser el máximo responsable creativo de la agencia y posteriormente como socio y director creativo ejecutivo de La Caseta. En 2007 fundó e impulsó su propia agencia en la ciudad de Sevilla, Parnaso, desde la que opera a nivel nacional e internacional dando un servicio integral a marcas de primer nivel como Puerto de Indias, Ubago, Fresón de Palos, GSC Aero, FER, Inés Rosales, Energía Plus, Alter Software o HGBS, entre otras.