Advertisement

Swing Swing: Crisis ¿qué crisis?

Cuando el momento económico y financiero de lo único que permite hablar es de recesión, inestabilidad laboral, crisis financiera e incertidumbre, llama más si cabe la atención que surjan proyectos nuevos en el mercado local como es el caso de Swing Swing. Una agencia que nace con el objetivo de ser un referente dentro del sector por su creatividad y gestión, pero sobre todo en la mente del anunciante, por su valía y buen hacer. Haya crisis o no.
 
Son nuevas en el negocio “independiente”, como ellas aseguran. Pero las explicaciones de Judith Francisco y Mercedes García delatan una experiencia en el negocio al alcance de pocos. Y es que llevan más de 13 años “dando guerra” en agencias de publicidad de primer nivel como SCPF, Wieden + Kennedy o Sra. Rushmore, entre otras. Una en la vertiente creativa y otra en funciones más ejecutivas o de cuentas. Y a lo largo de este tiempo han tenido oportunidad de dar servicio a marcas como BMW, Toyota, Viceroy, Coca Cola, Madrid 2016, Bocatta, Nike y Cacique, entre otras.
 
Ahora deciden tomar impulso y lanzarse de forma independiente en un proyecto denominado Swing Swing y que toma forma de agencia de publicidad especialmente pensada para anunciantes preocupados por sus marcas en los nuevos tiempos “Nos conocemos desde hace 18 años y siempre hemos tenido la ilusión de trabajar juntas, cosa que hasta la fecha no ha podido ser –explica García- Compartimos la visión empresarial de cómo debería ser una agencia de publicidad actual, la relación que debe tener con sus clientes o partners y la flexibilidad y la calidad que debe poseer para satisfacer sus necesidades actuales en materia de comunicación. Era el momento de controlar el 100% de la decisión sobre el trabajo y no sólo una parte, que es lo que podíamos hacer en nuestras anteriores agencias, por ejemplo”.
 
Desde Swing Swing son partidarias de profundizar más en la relación con el cliente. “En una agencia convencional cuando realmente tienes un conocimiento profundo del cliente normalmente se agota el tiempo del contrato, por lo que dejas de trabajar con él justo cuando pueden ver la luz los mejores trabajos o frutos de la relación –subraya en este sentido Francisco- Por eso desde Swing Swing trabajaremos en pro de una relación duradera con nuestros clientes, a los que conoceremos en profundidad para aportar realmente alternativas que les supongan únicamente beneficios”. La idea, al fin y al cabo, es generar un feedback continuo con el cliente. De ahí el nombre de la agencia y su imagen, identificada en el balanceo de un columpio.
 
Las fundadoras de la agencia, que de momento están arropadas por un equipo de seis personas más, tienen claro que no van a “revolucionar” el mercado de las agencias con su oferta de servicios: “Nos presentamos como una agencia creativa con conocimientos en todos los ámbitos y disciplinas de la comunicación publicitaria, con visión 360. Es decir, que creemos en la comunicación integrada e integral, aunque no siempre es necesaria. Más bien lo que queremos aportar son conceptos que funcionan al anunciante, idear y desarrollar campañas innovadoras que consigan que el anunciante sume”, explica García.
 
La base de su oferta, por tanto, reside en la creación de conceptos adaptables a diferentes disciplinas o soportes y que sean perdurables en el tiempo, que es lo que necesitan anunciantes y marcas en estos momentos. “Para la implementación de las campañas en áreas que no sean nuestro expertise contaremos con diferentes partners que se encargarán de llevarlo a cabo para el cliente, si desea hacerlo con nosotros, o lo dejaremos en sus manos y en el de sus agencias especialitas o implementadoras”, explica Francisco, aunque deja claro que prestan los mismos servicios que una agencia de publicidad actual. “La diferenciación con el resto de la competencia vendrá marcada por nuestra propia personalidad. Cada agencia se marca un camino y en Swing Swing tenemos muy claro cuál es la senda que queremos marcar”.
 
Son conscientes de que la situación económica mundial y que la industria publicitaria nacional está en proceso de recesión, pero precisamente piensan que pueden tener más posibilidades de triunfar por este motivo: “Ahora mismo los anunciantes buscan colaboradores de menor tamaño que sean más flexibles pero que ofrezcan garantías, como puede ser nuestro caso. El punto diferencial como la creatividad lo aportan en este mercado agencias independientes de menor tamaño y que consiguen ser diferentes, como Villarrosas o en su día SCPF o Sra. Rushmore, por ejemplo. Por eso tenemos opciones a estar presentes en el reparto de la tarta en estos momentos. La crisis sólo es un variable más a tener en cuenta, sí, pero no un freno a nuestro proyecto”, sentencia García.
 
De momento la agencia ha comenzado a trabajar para tres que pueden dar bastantes alegrías a sus fundadoras: Grupo Munreco (Viceroy, Sandoz), aunque compartido con la agencia SCPF, la compañía de ciclos eléctricos Yamimoto y la compañía de seguridad privada Esabe, que comienza su andadura en el mundo de la comunicación y publicidad de la mano de la agencia.