El fenómeno del tenedor vuelve dieciséis años después para despertar la nostalgia de la generación que lo disfrutó en 2007 e incentivar la diversión en la cocina entre los más pequeños de casa
Grupo Gallo ha presentado el relanzamiento de uno de sus mayores éxitos en la década de los 2000. Se trata del tenedor Rollin’ Gallo, cuyo lanzamiento en 2007 resultó en un fenómeno que marcó a toda una generación de niños. Dieciséis años después, el grupo despierta ahora la nostalgia de aquellos niños recuperando un fragmento de su infancia, pero cautivando también a los más pequeños de la casa, quiénes por primera vez podrán experimentar la diversión que proporciona Rollin’ Gallo en la mesa.
Con este relanzamiento, Grupo Gallo pretende aunar a dos generaciones de consumidores: los niños que descubrirán por primera vez la experiencia Rollin’, y los adultos que recuperarán un instante de su infancia. Una experiencia transversal entre generaciones impulsada por Gallo, con el objetivo de recuperar el espíritu de diversión en la mesa, convirtiendo el momento de la comida en una actividad lúdica y entretenida, pero también pedagógica: el tenedor Rollin’ Gallo gira enrollando los espaguetis o tallarines, proporcionando autonomía a los más pequeños de casa durante el momento de comer pasta.
El gadget, que cuenta con diez versiones coleccionables, se consigue de manera gratuita por la compra de un pack renovado, que incorpora tres paquetes de pastas Gallo, con Spaghetti Nº3, Tallarín y Spaghetti Integral, que se venderán integrados en un ‘pack Rollin’.
Durante este mes de abril, Grupo Gallo pone en marcha una “ambiciosa y atrevida” campaña de comunicación para dar a conocer el relanzamiento de Rollin’ Gallo. La campaña pretende respirar infancia y diversión, y por ello se ha fijado como target las familias con niños de 4 a 10 años, contando incluso con la participación de hijos de empleados de Gallo como protagonistas de la campaña.
Esta campaña tiene como eje central un spot televisivo inspirado en el antiguo anuncio para apelar a la nostalgia de padres y madres. En este spot, Grupo Gallo ha recuperado el jingle original que triunfó en televisión en 2007, el conocido y pegadizo “Rollin’-Rollin’”. Mediante un trabajo de estudio, se ha adaptado este jingle musical al momento actual en base a las tendencias actuales, sin renunciar a su esencia original en un claro guiño para los consumidores más nostálgicos.
Sin embargo, la campaña de Rollin’ Gallo también pretende captar la atención de las nuevas generaciones de niños, que por primera vez descubrirán este elemento divertido y especial para incorporarlo en sus comidas. Por ello, la campaña también pone su objetivo en comunicar el lanzamiento de diez modelos distintos coleccionables: Chulín, Spunky, Sleepy, Rolly, Rocky, Pirata, Masky, Lovely, Looky y Sweety.
La campaña también trabaja con contenido en redes sociales, principalmente con Reels en Instagram y Facebook, una pieza en Youtube, y también con one shots en Tik Tok como principal novedad. Para la campaña en redes sociales, Grupo Gallo contará con influencers de perfil familiar, quiénes se encargan de visualizar en primera persona la diversión que proporciona Rollin’ Gallo para los más pequeños del hogar.
A nivel digital, el plan desarrolla una propuesta específica con piezas concebidas para el medio digital y dar máxima cobertura a este canal. A estos dos ejes se suma el planteamiento estratégico para prensa generalista y especializada, que permitirá llegar al consumidor final con el apoyo de publicaciones y cabeceras del ámbito gastronómico, económico y lifestyle, que aportarán un elevado nivel de capilaridad. El plan culmina con una acción de sampling masivo a empresas especializadas del sector, influencers y partners que han colaborado en el proyecto.