El final de la crisis está cada vez más lejos
Los panelistas de Zeniht Vigía, afectados por temas como la guerra en Libia, el tusunami y posterior pánico nuclear en Japón, los problemas económicos de Portugal y el alza de precios del Euribor y el petróleo, se muestran más pesimistas que el pasado mes de enero y cifran sus expectativas de crecimiento en un 0,9%, mientras que a principios de año esta cifra se elevaba hasta el 2,1%. En todo caso un crecimiento, aunque sea ligero, será bienvenido en un mercado que actualmente se mueve en cifras inferiores a los seis mil millones de euros, un valor similar al que se manejaba en el año 2000 y que no espera el final de la crisis en el sector hasta el primer trimestre de 2012 ( en los últimos dos meses se ha retrasado casi tres).
El hecho de que el IPC, el Euríbor y el precio del petróleo se hayan disparado en los últimos meses puede provocar una contracción del consumo, lo cual perjudicaría al mercado publicitario, ya de por si afectado por la crisis financiera. Donde más se advierte el deterioro de los sentimientos de los directivos es en los índices de percepción. El IPSE cae hasta un valor de -26 (desde el -13,5 de enero); se trata del peor valor desde el mes de mayo de 2010 cuando se produjeron los ajustes, entre otras cosas, de los sueldos de los funcionarios. La última vez que este índice alcanzó valores positivos fue en diciembre de 2007. El IPMP también desciende, en este caso hasta con un preocupante cambio de signo. Se sitúa ahora en -23,1, cuando en enero estaba en +1,4. Además cuatro de los cinco datos anteriores habían sido positivos. Al menos el IPMP se mantiene por encima del IPSE, lo que veníamos interpretando como una buena señal, tanto para la economía como para el mercado publicitario.